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No todo lo que brilla es oro.
Ser famosa en todo el mundo puede llevarte a querer renunciar.
Lady Gaga ha sido nombrada Mujer del Año por la revista Billboard, lo que es irónico ya que casi termina su carrera como estrella pop a finales del 2014. “Me dice mucho el que haya sido reconocida como Mujer del Año 2015. Este es el año en que hice lo que quería en vez de seguir adelante con lo que pensaba que todos querían de mí”, comentó.
“A finales de 2014 mi estilista me preguntó si quería dejar de ser una estrella pop. Y lo miré y le dije: ‘Si pudiera detener esto hoy, lo haría. Pero no puedo. Pero necesito un tiempo libre ahora porque voy a morir’. Cuando vas tan rápido que ya no te sientes segura, sientes que te golpean y no puedes pensar bien. Pero luego sentí manos levantándome. Era como si todos vinieron e intentaron devolver una estrella en el cielo y no iban a defraudarme”, explicó.
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Gaga se hizo famosa por el single Just Dance en 2008. Aseguró que necesitaba descansar para descifrar qué clase de artista quería ser. “No puedes vender tu alma una vez que obtienes el éxito. Es un gran error el buscar simplemente el dinero para mantenerte en primer lugar. Y creo que todos querían eso de mí. Pero soy una chica distinta. La gente cree: puedes sentarte al piano y escribir, pero no pude escribir durante dos años. Para ARTPOP buscaba ritmos. No quería estar cerca de un piano. Eso era demasiado emocional. Comenzaba a cantar y tocar y mi mente decía: ‘eres demasiado talentosa para esto. Mie**a tu voz suena bien. Mie**a ese coro es genial, mie**a esas líricas son estupendas. ¿Por qué dejas que esta gente te derrumbe al piso? ¿Cuándo te convertiste en un robot? ¿No puede bastar el ser artista? ¿Lo es el talento? Creo que para Adele lo es. Para Bruno Mars, lo es”, afirmó.
Para encontrar su centro, Gaga grabó un disco de jazz y emprendió una gira con TonyBennett quien se hizo su amigo y mentor. “Es eso lo que aprendí de trabajar con Tony: si el talento no lo es todo, entonces estás fuera de lugar. Por eso cada alto y bajo de mi carrera ha valido la pena. Me ha llevado a epifanías. No podemos crear sin epifanías. Podrías tener una y ni saberlo porque estás muy exaltada o hay muchas modelos chupando tu **** o estás intoxicada por el estilo de vida. Agradezco lo que tengo pero eso no significa que no valoro la vida. Porque aunque esta casa es hermosa, una vez que traspaso mi propiedad ya no soy más libre. Es legal perseguirme por el mundo entero. Lo que me hace feliz es ese piano”, confesó.
